T.E.
16/10/2019

Thomas Cook, la mayor quiebra de la historia del turismo, también ha tenido sus efectos en la Costa Daurada. 55.000 plazas ya estaban comprometidas, con el epicentro en Salou, y la anulación de los vuelos previstos en el aeropuerto de Reus, serían los efectos negativos más inmediatos.

¿Pero cómo se han visto afectados los hoteleros más allá de las anulaciones? Según comentan algunos afectados, están pendientes de cobro los contratos de prácticamente todo el verano, antes del anuncio de la quiebra, y aunque no se teme en que el impago se prolongue, sí que el efecto dominó que ha provocado la quiebra ha sacudido igualmente a otras empresas que dependían, a su vez, de las cadenas hoteleras contratadas: excursiones, guías turísticos, alquiler de coches, entre otros, están también pendientes de cobrar sus facturas.