T.E.
31/01/2022

Imagen virtual de cómo quedará la futura treminal de cruceros una vez finalizada.

La semana pasada finalizaba con una gran noticia para el enclave tarraconense. El Port de Tarragona adjudicaba a Global Ports Holding (GPH) la construcción y gestión de la nueva terminal de cruceros. GPH, el mayor operador de cruceros del mundo, que en nuestro país ya gestiona terminales del sector tan relevantes como la de Barcelona y la de Las Palmas, invertirá 5,5 M en la de Tarragona. El Port le otorga una concesión por 12 años con posibilidad de ampliarla otros 6.

La inversión de GPH se sitúa en la lista de proyectos que pueden llevar a la infraestructura tarraconense a plantarse en 2023 con una serie de importantes equipamientos que proyectarán el territorio y, sin duda, harán crecer los tráficos portuarios. La futura ZAL, un millón de metros cuadrados de suelo logístico, en el mismo puerto; la plataforma PortTarragona Terminal Guadalajara – Marchamalo, 150.000 m2 de suelo logístico en el centro de la Península; la participación del Port en la TIM de Monzón, una realidad de gran valor para el tráfico de agroalimentarios; la reforzada apuesta por el ferrocarril, junto a inversiones privadas como la de La Boella, serán, entre otros ejemplos, inversiones que ya estarán rodadas en 2023 o será el año de su puesta en marcha.