T.E.
01/07/2021


A veces puede ser una buena estrategia, especialmente si la imagen de una empresa ha sido seriamente dañada. En otras ocasiones, el cambio de denominación obedece a criterios de mejora de imagen comercial o estratégicos de negocio. En el caso al que nos referimos se trata de una empresa del clúster químico local. Son únicamente rumores, que bien podrían materializarse. La dificultad es saber si, con el cambio, efectivamente, va a mejorar la imagen púbica de la compañía. O simplemente se trata de un maquillaje para desviar la atención y dejar el antiguo nombre como una rémora del pasado, y que la opinión pública lo acepte sin más… Es difícil acertar, y mucho más si, gracias al cambio, este pueda dar pie a una ola de nuevas críticas. Por el bien de la propia empresa y del sector, deseamos la mejor de las soluciones.