T.E.
01/08/2019

 

Adif Alta Velocidad ha aprobado el cambio de ancho de vía de ibérico a estándar en el tramo Castellón-Vinaròs y Vinaròs-Vandellós por valor de 81,8 millones de euros y un plazo de ejecución de 18 meses, una decisión que supone la incorporación al sistema ferroviario europeo. El comisionado para el Corredor Mediterráneo, Josep Vicent Boira, ha destacado que esta obra, que se efectuará en un trayecto de 157 kilómetros, permitirá la circulación de trenes de 750 metros de longitud, según los parámetros de interoperabilidad europeos, y aumentará las prestaciones de capacidad, fiabilidad y disponibilidad tanto para los viajeros como para las mercancías.

 

Las obras tienen un plazo de ejcución de 18 meses (

 

El contrato de obras para el tramo Vinarós-Vandellós (67 km) se ha licitado por importe de 33,7 millones y se realizarán también obras en otros 13 km, correspondiente al ramal L’Aldea-Tortosa. En la estación de Ulldecona se adecuará una vía para disponer de una longitud útil de 750 metros para el estacionamiento de trenes de mercancías de ancho estándar, y se hará el retranqueo y avance de andén con nuevas rampas en las estaciones de Ulldecona, L’Aldea-Amposta y L’Ametlla de Mar.

En estos tramos se seguirá además el modelo alemán que permite compatibilizar los usos, para trenes de larga distancia, cercanías y mercancías, lo que permitirá también una mayor rentabilidad de la inversión pública. La vía de uso mixto (pasajeros y mercancías) es rentable socialmente porque es más aprovechable en relación a la alta velocidad y la línea será capaz de absorber las demandas crecientes de tráfico sin llegar a la saturación, ha señalado Boira, que se ha mostrado partidario de un régimen transitorio de ayudas a las empresas logísticas para adaptar su material rodante al ancho internacional.

Estas actuaciones podrán ser cofinanciadas por las Ayudas RTE-T (Redes Transeuropeas de Transporte).